Encuentre Formas de Ayudar a que su Hijo se Recupare

Colaborar con el equipo de atención médica de su hijo

Luego de la internación. Asistir a los controles de seguimiento

Usted tiene la importante tarea de asegurar que su hijo reciba la mejor asistencia médica para sus lesiones físicas. Usted también es la mejor persona para supervisar cómo su hijo está manejando la situación y en qué casos puede ser necesaria un poco de ayuda adicional.

En los primeros días que siguen a una lesión, muchos niños (y padres) se sienten algo angustiados, nerviosos o preocupados, por lo que pueden pedir un poco de apoyo extra a familiares y amigos.

Luego de la internación. Asistir a los controles de seguimiento

Una vez que su hijo reciba el alta del hospital o de la sala de emergencias deberá mantener un seguimiento con su médico y, posiblemente, con otros profesionales de la salud para asegurarse de que se está curando adecuadamente. Le será útil visitar el resto de este sitio web antes de ir al médico. Este sitio le permitirá valorar las reacciones de su hijo y crear un informe para compartir con su médico.

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Trabajar con el equipo médico LUEGO de la internación: sugerencias de otros padres

  1. Asegúrese de cumplir con todas sus consultas médicas incluso si su hijo se encuentra mejor.
     
  2. A muchos padres les gusta reunir toda la información sobre la lesión de su hijo en un archivador o carpeta. En la portada de su carpeta coloque una hoja con el diagnóstico de su hijo y todos los medicamentos que esté tomando.  Mantenga un calendario con todas las consultas.
     
  3. En casa, tenga una libreta a mano para anotar preguntas para su médico u otros profesionales de la salud que le puedan surgir. Anime a su hijo a que haga también un seguimiento de las preguntas.
     
  4. Usted es el defensor más importante de su hijo, pregunte cómo puede involucrarse en el cuidado de su hijo y cuándo puede tomar decisiones sobre el tratamiento. Haga saber a su equipo médico si su hijo está sufriendo o está teniendo otras reacciones que le preocupan a usted o a su hijo.
     
  5. Asegúrese de disponer de un número de teléfono para poder llamar si tiene preguntas. Pregunte también a qué debería estar atento buscar y cuándo llamar.
     
  6. Solicite un resumen de cada visita para llevarse, si es posible.
     
  7. Si nota que está perdiendo mucho tiempo de trabajo puede intentar solicitar una Licencia por enfermedad de un familiar. En 1993, el gobierno federal aprobó una ley que permite a las familias emplear parte de su tiempo en cuidar a familiares, sin miedo a perder el trabajo.

Consejos para ayudar a su hijo en los controles de seguimiento. A continuación encontrará algunos consejos importantes que podrá recordar para ayudar a su hijo con los controles de seguimiento.

  1. Hable con su hijo sobre la consulta con algunos días de antelación. Explíquele las razones de la visita, utilizando palabras que su hijo pueda comprender. Responda a sus preguntas de forma sencilla y honesta.
     
  2. Averigüe con antelación si la visita implicará algún procedimiento doloroso o que pueda asustar a su hijo. Si así fuera, hable de antemano con su médico sobre cómo prepararse para estos procedimientos y si se debe administrar algún medicamente.
     
  3. Hágale saber a su hijo que permanecerá durante toda la consulta, a menos que él quiera disponer de cierto tiempo para hablar con el médico o especialista a solas. Aliente al médico de su hijo a que le formule preguntas directamente. Anime a su hijo a que formule preguntas a los médicos y enfermeras.

En la visita de seguimiento: recursos para las familias

La mayoría de los hospitales tienen personal experimentado en ayudar a otros pacientes y cuidadores en su misma situación. Si está preocupado, tiene preguntas sobre cómo ayudar a su hijo, sobre cuestiones médicas o de seguros, o simplemente necesita hablar con alguien, busque a alguien del hospital que pueda ayudarlo tanto a usted como a su familia. Esta persona puede ser un:

  • Trabajador social
  • Capellán
  • O un profesional de la salud mental, como un psicólogo o psiquiatra. Vuelva a visitar este sitio web para recibir más información acerca de las formas en que los padres pueden ayudar a sus hijos.