Encuentre Formas de Ayudar a que su Hijo se Recupare

Colaborar con el equipo de atención médica de su hijo

En la sala de emergencias

Usted tiene la importante tarea de asegurar que su hijo reciba la mejor asistencia médica para sus lesiones físicas. Usted también es la mejor persona para supervisar cómo su hijo está manejando la situación y en qué casos puede ser necesaria un poco de ayuda adicional.

En los primeros días que siguen a una lesión, muchos niños (y padres) se sienten algo angustiados, nerviosos o preocupados, por lo que pueden pedir un poco de apoyo extra a familiares y amigos.

En la sala de emergencias

Estar en la sala de emergencias puede ser una experiencia estresante y aterradora para los niños lesionados y para sus padres. Los padres tienen muchas preocupaciones y preguntas y, en ocasiones, puede ser difícil responder a todas ellas de inmediato. Comunicarse bien y a menudo con el equipo médico de emergencias sobre su hijo le ayudará a suministrarle el mejor tratamiento posible. También puede ser útil que cumpla una función más activa en el cuidado de su hijo.

Trabajar con el equipo médico, recomendaciones de otros padres:

Los cuidados de emergencia requieren mucha paciencia. Puede que lo frustre que otros niños sean atendidos antes que el suyo, pero esto es debido a que el personal tiene que asegurarse de atender primero a los pacientes más graves.

  • No tenga miedo de preguntar. Si no comprende la respuesta, hágaseñp saber al equipo médico y vuelva a preguntar.
  • Acompañe a su hijo tanto como sea posible. Pida permiso para estar con su hijo durante las pruebas y procedimientos médicos, si así lo desea.
  • Asegúrese de que el equipo médico conozca las patologías preexistentes, cualquier necesidad o miedo específico, las alergias que su hijo pueda tener, así como todo lo que pueda contarles sobre cómo se produjo la lesión.
  • Usted es el defensor más importante de su hijo, pregunte cómo puede involucrarse en el cuidado de su hijo y cuándo puede tomar decisiones sobre el tratamiento.
  • Asegúrese de ser el defensor de su hijo. Por ejemplo, si su hijo tiene dolor, hágaselo saber al equipo médico a cargo.
  • Los cuidados de emergencia requieren mucha paciencia. Puede que lo frustre que otros niños sean atendidos antes que el suyo, pero esto es debido a que el personal tiene que asegurarse de atender primero a los pacientes más graves.

Consejos para ayudar a su hijo en la sala de emergencias

Incluso en medio de una emergencia puede hacer cosas para ayudar a su hijo.

Recuerde estas 5 cosas:

  1. Usted es la persona que mejor puede ayudar a su hijo. Manténgase calmado y tranquilo. Sostenga su mano, distráigalo con una historia o juego, etc. Si es necesario, establezca reglas y límites tal y como haría en casa.
  2. Ayude a su hijo a comprender qué está sucediendo. Asegúrese de que el equipo médico le explique las cosas a su hijo de forma que pueda comprenderlas. Sea sincero pero reconfortante sobre lo que sucederá. ("Esto te dolerá pero te ayudará a recuperarte.")
  3. Deje que tu hijo hable sobre sus preocupaciones o sentimientos. Invite al equipo médico de su hijo a hablar con él directamente. En la medida que sea posible, deje que su hijo responda por sí mismo. No fuerce a su hijo para que hable, pero quédese junto a él para escucharlo cuando esté preparado.
  4. Cuide de usted mismo. Obtenga ayuda para usted mismo cuando esté preocupado y angustiado. ¡Acuérdesee de comer y dormir!
  5. Pida ayuda a familiares y amigos. Una vez que su hijo haya sido dado de alta y haya vuelto a casa, vuelva a visitar este sitio web para recibir más información acerca de las formas en que los padres pueden ayudar a sus hijos.